Te damos algunos consejos para que puedas cocer unas piezas de Huevo San Juan sin complicaciones.
¿Realmente es fácil cocer un huevo? A simple vista puede parecer muy sencillo, sin embargo, como en todo, debes seguir ciertos pasos para que todo salga como esperamos. Sigue leyendo y descubrir las recomendaciones para saciar tu antojo como un experto.
Es muy importante sumergir piezas frescas en el agua. No olvides que cuando un huevo lleva mucho tiempo en tu casa, éste se deshidrata y aumenta el tamaño de su cámara de aire. ¡Recuerda que puedes comprobar su estado con el Frescómetro San Juan!
Otra forma de cerciorarse de que el huevo esté fresco, es verificar si se sumerge en el agua caliente. Si el huevo se mantiene flotando, puede que se mueva de un lado a otro sobre el agua durante la cocción y llegue a romperse.
Otro punto a considerar es que al menos una hora antes de cocer el huevo lo saques del refrigerador para que esté a temperatura ambiente, así evitarás un choque térmico al introducirlo en agua caliente y será menos probable que se rompa el cascarón.
Ayúdate con una cazuela que no sea muy grande pero sí suficientemente profunda para que el agua pueda cubrir en su totalidad a cada huevo. Y si te preocupa que el cascarón se rompa antes de que el huevo esté bien cocido, agrega un puño de sal y un chorrito de vinagre al agua. De esta forma, estos ingredientes sellarán cualquier grieta que se produzca por el calor, y además facilitará la coagulación de las proteínas en el huevo.
Cuando el agua esté hirviendo, debemos dejar el huevo alrededor de 11-12 minutos, dependiendo de su tamaño o del número que se están cociendo al mismo tiempo; aquí puedes ver el mejor ejemplo para conseguir la consistencia ideal para el huevo cocido.
Si se deja un mayor tiempo del antes mencionado, te puedes arriesgar a obtener un huevo gomoso, con clara de olor desagradable y una yema con tonos verdes o grises. Esto es debido a que las proteínas de la clara contienen átomos de azufre. Por lo que si te pasas de tiempo, se liberará sulfuro de hidrógeno, un gas que provoca un mal olor y un color verdoso a la yema. Pero no te preocupes, aún así es comestible, sin embargo el aspecto no será el más apetitoso.
Una clara se solidifica a 62 ºC y la yema a 68 ºC, aunque sabemos que en casa es algo complicado ser tan precisos; por lo que te recomendamos solamente guiarte con el comportamiento del agua, es decir, desde que comienza a burbujear y ya está hirviendo, baja la intensidad de la flama y comienza a contar el tiempo para alcanzar tu consistencia preferida.
Un huevo cocido correctamente debe mantener su clara blanca y compacta. Mientras que la yema debe ser completamente sólida y sin colores grises o verdosos. Además, el cascarón no debe estar roto ni pegado a la clara y debe poder pelarse fácilmente.
Fuente:
Lavanguardia.com (31 de enero, 2019) Los 7 errores básicos que cometes al hacer un huevo duro. Recuperado de: https://www.lavanguardia.com/comer/materia-prima/20190131/4682590422/huevo-duro-errores-cocina-trucos.html
Recetasderechupete.com (febrero, 2018) Cómo cocer huevos duros. Recuperado de: https://www.recetasderechupete.com/como-cocer-huevos-duros/12205/